viernes, 25 de septiembre de 2015

Piedad! Edda Cavarico



Que no bendigan los fusiles!
Que no inviten a dios a la guerra!

Que la vida es eterna si se prolonga

Que la muerte es injusta si se acelera

que no bendigan los fusiles!

que no inviten a dios a la guerra!

domingo, 5 de julio de 2015

De: Arcana Matria



Matria,
de doler floreciste en las palabras

                                    Piedad Morales

Mi mente divaga en la hierba
se desvanece la luna amarilla
poeta piedad caminar de grilla boreal

Cigarra única
pelirojapeliroja

Soy una de tus hijas
de los aquelarres en la casa de Vamos
conspiradora
vocera del sendero
con voz recía en la plaza de Roldanillo

Ungüento para desvanecer el olvido
Carnavalenguas
Hoja vuela del árbol a la tierra
Hoja flota en el horizonte petirrojo
en el horizonte un sueño
todas y todos en una pluma

                                A su memoria



viernes, 27 de marzo de 2015

Ciudad mía








oy lloro por tí, ciudad mía.
Sé que un hongo maligno
en tus calles respira
dejando las horas en lenta agonía.

Pero también sé
que aún los pájaros anidan
y tal vez el dolor de esta noche
lo borre la brisa.



Vylmen  Dalie. Danza en el tiempo prosas y poemas. Colombia,1995.

martes, 13 de enero de 2015

Jaime Jaramillo Panesso. Medellín, 1938.



Barrio Antioquia

Se llamaba Barrio Antioquia


después le pusieron Santísima Trinidad


para purgar los actos


de las mujeres malucas


que el arzobispo no podía tocar


barrio tamborero y caliente


de hombres y mujeres arrumados


contra paredes estrechas


y cafés cubiertos con baldosas lisas


de tanta guaracha


de tanto mambo aplazado


de tanto porro de tanta salsa


después vino el filo


de la cuchilla mecánica


y cortó con avenidas y cemento armado


el camino conocido


por los mestizos y las negras


que en aceras y zaguanes


vendían empanadas de carne


patacones de plátano verde


y direcciones precisas de amigas amables


barrio con notas de vallenato


Lucho Bermúdez y Edmundo Arias


con Gardel mordiendo las orillas


de un arrabal descuartizado